Cristián Martínez, estudiante del programa de Doctorado en Filosofía, acaba de obtener una beca de cotutela DAAD para realizar una estadía de investigación en la Universidad de Colonia, Alemania.

El doctorando e investigador adjunto del IDF, Cristián Martínez, obtuvo la beca de cotutela por parte del Servicio Alemán de Intercambio Académico (DAAD), que cubre gastos de estudio y manutención en Alemania por un periodo de hasta dos años, con el requisito de realizarlos en el contexto de un contrato de cotutela con una universidad alemana, en este caso, la Universidad de Colonia. En su caso, por ser además becario ANID, la estadía será de un año.

“Fue grande mi sorpresa y me sentí muy feliz. Además, me hizo reflexionar acerca de la fortaleza y calidad de los estudiantes doctorales de la Universidad Diego Portales. Es decir, esto indica un precedente, en el sentido de que la mayoría de los estudiantes realizábamos las pasantías o cotutelas financiados o por ANID o por UDP. Ahora, se sabe que existen otras posibilidades de financiamiento. Lo importante es ir generando las conexiones y mejorando, sobre todo, tu conocimiento de idiomas (en este momento, estoy avanzando de un B1 a un B2 en alemán). Si todo sale bien, en octubre comenzaría mi estadía de cotutela en la Universidad de Colonia como becario DAAD. Me siento muy motivado y consciente de que, para lograr el éxito académico en filosofía, uno debe estar siempre en movimiento, es decir, ser proactivo”, reflexiona el estudiante.

Martínez explica que existen diferentes formas de financiamiento por parte de DAAD para hacer estadías de investigación en Alemania, cursando un doctorado en una universidad en el extranjero (ver más información aquí). El modelo de cotutela que se adjudicó incluye un curso de alemán antes de iniciar la cotutela, así como la posibilidad de organizar una estadía larga o varias estadías cortas que no superen los dos años de corrido.

Esta cotutela comenzó a gestionarla en julio de 2020, luego de un proyecto de estadía fallido en Australia, que no pudo realizar a causa de la pandemia; debido a esto, perdió los fondos que había ganado en el concurso de gastos complementarios ofrecidos por ANID. Tuvo que adaptarse y cambiar de estrategia, buscar una nueva casa de estudios: “Tenía en mente buscar un lugar donde pudiese continuar con mi investigación en el marco del enactivismo pero que, al mismo tiempo, me ofreciese la oportunidad de profundizar en la fenomenología husserliana. Fue dentro de ese contexto el descubrimiento de la Universidad de Colonia como posible lugar para realizar mi cotutela doctoral”.

Cristián Martínez llegó al programa de Doctorado en Filosofía de la UDP “motivado fundamentalmente por inquietudes relativas al concepto de mundo en la fenomenología husserliana”. En 2017 había trabajado el concepto en el contexto de una clase con el prof. Roberto Rubio, en la Universidad Alberto Hurtado: “No obstante, mi trabajo en ese momento (Magíster en Filosofía) se centraba más bien en el problema mente-cuerpo en el enactivismo, investigación que realizaba bajo la guía de la profesora Glenda Satne. Estaba muy interesado en conocer los postulados del enactivismo en torno a los diversos temas relacionados con las ciencias cognitivas, aunque, sinceramente, siempre centré mi atención en el concepto de mundo. Una vez finalizado mi proceso de magíster, postulé a la UDP para estudiar con el profesor Bernardo Ainbinder, quien aceptó guiarme con una tesis sobre el tema del mundo en el enactivismo pero desde una perspectiva fenomenológica. Es así como comencé a trabajar en la comprensión de este concepto, tanto en la fenomenología como en el enactivismo”.

-¿Con quién vas a trabajar en Alemania?

-En la Universidad de Colonia, el profesor Thiemo Breyer aceptó coguiar mi investigación y, por suerte para mí, en inglés. Actualmente, el profesor Breyer trabaja en dos proyectos, uno relacionado con empatía y resiliencia a partir de la fenomenología de la intersubjetividad y otro relacionado con antropología filosófica. Dado que su trabajo se posa en la intersección entre fenomenología y las ciencias empíricas, su perfil atrajo inmediatamente mi interés. De ese modo, mi trabajo es ahora guiado por dos especialistas en fenomenología, los profesores Ovidiu Stanciu (UDP) y Thiemo Breyer (UKöln), añadiendo el componente extra del profesor alemán, quien además se ha especializado en teoria de la ciencia y filosofía analítica. Debido a que mi investigación posee un fuerte compromiso interdisciplinario, me alegra tener la posibilidad de desarrollarlo bajo la guía de estos dos profesionales.

-¿Podrías contarnos más acerca de tu investigación?

-Se trata de especificar un concepto de mundo para el enactivismo, específicamente en sus versiones autopoiético (Varela, Thompson, Rosch, Di Paolo) y sensoriomotriz (O’Regan y Noë). Una asunción fundamental de mi investigación es que es posible concluir una multiplicidad de mundos en el enactivismo, los cuales son constituidos en base a biodinámicas dotadas de un fuerte componente subjetivo, y  que se definen en función de diversas posibilidades de acción como, por ejemplo, el caso de la relación entre nuestro mundo circundante (Umwelt) y nuestras capacidades perceptivas corporalizadas. El propósito de mi investigación es complementar ese concepto de mundo haciendo uso de la caracterización husserliana del mundo. Específicamente, quiero proponer un concepto de mundo basado en dos características fenomenológicas, a saber, el ser horizóntico del mundo –el cual nos permite identificar un carácter de progresividad e indeterminación determinable en la experiencia– y su ser formal o lo que Husserl ha llamado el a priori del mundo, el cual nos permite adscribir ciertas formalidades en el carácter subjetivo-relativo del mundo, a saber, una causalidad, espacio-temporalidad y una sustancialidad que son derivadas de nuestra experiencia corporalizada de la realidad. De tal manera, el complemento que ofrece mi investigación al enactivismo es el de brindarle una base a partir de la concepción de la unitariedad y unicidad del mundo ante la cual, como dice Husserl en Crisis, “el plural no tiene sentido cuando se le aplica [al mundo]”. En palabras simples, pretendo complementar la multiplicidad de mundos enactivos estableciendo su posibilidad de diferenciación a partir de la descripción de un mundo único y, en cierta medida, común a todos los seres vivos.